Ayer me enviaron a través de Whatsapp un vídeo al que añadieron el comentario ‘da que pensar’. Hoy, tras verlo y sin saber qué me iba a encontrar, no me queda otra que darle la razón a la persona que me lo dijo y quitarme el sombrero ante la magnífica campaña realizada por Eva Bailén y por cómo está enfocada. Os dejo con el vídeo (por favor, vedlo antes de seguir leyendo, son menos de 4 minutos):
¿Cómo se os ha quedado el cuerpo? A mi me ha tocado la fibra. No se puede negar que trata un tema del que empieza a hablarse últimamente y además lo hace de una forma totalmente inesperada. Lo más habitual es esperarse que al final del vídeo aparezca una mujer porque da la sensación que se habla sobre la carga de trabajo que muchas de ellas tienen, pero no… ni más ni menos se está explicando cómo puede llegar a ser una jornada normal para un niño.
¿Realmente son necesarios tantos deberes? Hay varios estudios que dicen que no, que no refuerzan los contenidos dados en clase y que lo que sí que consiguen es que el alumno se desmotive o que pueda ser causa de conflictos familiares ¿Esto quiere decir que nunca hay que hacer deberes? Por supuesto que no, no pasa nada si hay que acabar alguna tarea, hacer un trabajo o preparar un examen en casa, pero no perdamos de vista que son niños y que, por cosas como estas (y otras que luego comentaré), no tienen tiempo de ponerlo en práctica.
Por la edad de nuestros hijos (4 y 1), nosotros aún no estamos sufriendo esta situación, pero tenemos algunos amigos con hijos más mayores a los que, en primero de primaria, ya les ponen ‘una hora a la semana de deberes’ para que se vayan acostumbrando… acostumbrando a qué? Para mi es un tema importante que me preocupa y quiero que cuando mis hijos sean algo más mayores este tema esté, como mínimo, enfocado de otra forma; tal y como dice el vídeo, por muchos deberes que hagan nuestros hijos no están saliendo mejor preparados (los resultados de los informes PISA lo demuestran y el porcentaje de fracaso escolar también). Fijémonos en quién sí lo hace bien y por qué...
Por supuesto la falta de tiempo no la tienen solo los dichosos deberes; muchas veces nosotros, los padres, colaboramos a que no tengan ni un rato libre cuando los apuntamos a un deporte, a música y a inglés. Porque claro, queremos que estén muy bien preparados… pero no deberíamos querer también que tengan tiempo de jugar? O es que jugar es perder el tiempo?
Para acabar, si queréis apoyar la campaña de Eva Bailén por la racionalización de los deberes escolares en el sistema educativo español podéis hacerlo en la plataforma Change.org, clickando aquí.
Genial, al principio había pensado en un/a amo/a de casa, pero a la mitad del video ya me he dado cuenta de que era un niño. Y es que no le falta razón, si no disfrutan su niñez a tiempo no lo van a poder hacer nunca.
ResponderEliminarComparto.
Pues qué perspicaz! Está genial el vídeo y la campaña :D
Eliminaryo tambien he empezado pensado, ya está el típico video de la madre, pero no... sorpresa :(
ResponderEliminarme ha tocado bastante porque tengo un peque de 8 que desde que ha empezado el cole no para de hacer deberes, no entiendo porque una señora,la profe, tiene derecho a decidir sobre el tiempo de mi hijo en MI CASA.
Pues vaya, lamento que lo estés viviendo en primera persona... habéis comentado algo con el profesorado?
Eliminares de la vieja escuela y es difícil..., hay ciertas personas que cambiar les supone un esfuerzo y se cierran en banda.
EliminarGente que lleva años en esto y no tienen ninguna ilusión por su profesión ni enseñar de verdad, pero claro tienen plaza fija, aunque claro esto ya es otro debate.
En la primera reunión del curso, ya avisaba de quien no tuviera los deberes tendría negativos, y varios negativos implicaría la bajada de las notas... una tontería vamos. Entre la profesa y la mayoría de padres que lo tienen tan asumido como algo normal, es difícil luchar, por eso espero que esta campaña se mueva y llegue a algo positivo.
Uff... pues sí que lo tenéis chungo, sí. Y lo de los negativos, una tontería como una casa... A ver si entre todos conseguimos cambiar estas mentalidades. Un saludo!
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